USCIS ha decidido pausar de manera temporal las aprobaciones de residencia permanente para los beneficiarios de asilo político y los refugiados, en un intento de realizar una revisión más profunda de cada caso.

El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) ha pausado temporalmente la finalización de ciertas solicitudes de residencia permanente, también conocidas como green cards, como parte de una nueva medida para realizar una verificación más rigurosa de los solicitantes. La decisión responde a una orden ejecutiva firmada por el expresidente Donald Trump el 20 de enero, titulada "Protegiendo a Estados Unidos de Terroristas Extranjeros y Otras Amenazas a la Seguridad Nacional y Pública."
Esta orden exige a las agencias federales implementar procesos de evaluación y verificación al máximo nivel posible para todos los extranjeros que deseen ingresar o permanecer en el país, especialmente aquellos provenientes de regiones consideradas de alto riesgo para la seguridad nacional.
De acuerdo con CBS News, USCIS ha instruido a su personal a realizar evaluaciones adicionales sobre solicitantes que fueron admitidos como refugiados o que obtuvieron asilo, y que ahora buscan ajustar su estatus migratorio para convertirse en residentes permanentes legales.
Un vocero del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) confirmó que se está imponiendo una pausa temporal en la resolución de ciertas solicitudes de ajuste de estatus, mientras se completan estos nuevos procesos de verificación.
El camino a la Green Card puede ser complejo, pero lo más importante es contar con la asesoría legal correcta para evitar errores en el proceso. |
¿Qué implica esta medida?
Para los refugiados y asilados, esta nueva verificación representa una revisión adicional sobre un proceso que ya es exhaustivo. Quienes solicitan refugio en EE. UU. son sometidos a múltiples filtros de seguridad antes de ser aprobados, incluso desde antes de su llegada al país. Además, deben esperar un año antes de poder solicitar la residencia permanente.
Laura Collins, directora de la Iniciativa de Crecimiento Económico del Instituto George W. Bush, destacó que estas personas ya han sido aprobadas por el gobierno estadounidense para estar en el país. “Se requiere bastante documentación tanto para refugiados como para asilados”, explicó Collins. “Todos estos individuos ya han pasado por un proceso riguroso para ser aceptados”.
Collins también señaló que durante la primera administración Trump, USCIS solía rechazar solicitudes por errores mínimos, como dejar en blanco el espacio de “segundo nombre” aunque el solicitante no tuviera uno. No descarta que esta vez se realicen nuevas verificaciones en redes sociales u otros aspectos que ya se revisaban, pero con más detalle o por diferentes funcionarios.
Aunque esta medida busca reforzar la seguridad nacional, también genera incertidumbre para miles de personas que esperan obtener su residencia permanente después de haber sido reconocidas como refugiadas o asiladas. Habrá que esperar cómo se implementan los nuevos procesos de verificación y cuál será el impacto real sobre los solicitantes y sobre el funcionamiento de la agencia.